Se acerca el verano y como papás sabemos que para muchos de nuestros niños es complicado encontrar un lugar al que podamos vacacionar o encontrar actividades para realizar con nuestros pequeños pues el cambio de rutinas nos trae a veces rabietas, cambios bruscos del comportamiento y mas.
De forma particular, en familia hemos salido al menos una vez al año a la playa porque es algo que a nuestro niño le encanta y que al mismo tiempo le fortalece al ejercitarce dentro de la alberca y le fascina jugar con la arena lo que ayuda a la parte sensorial y también ama ver el movimiento de las olas.
Poco a poco hemos adquirido trucos o habilidades para pasarla mejor. Desde buscar un lugar donde sea menos concurrido, hasta el tipo de flotador que debe usar.
Hace unas semanas nos trasladamos de vacaciones y fue mi inspiración para este texto, porque creo que a muchos papás podría ayudarle lo que a nosotros nos ha funcionado.
A mi pequeño le gusta viajar en auto, entonces la distancia no es un problema para el traslado. (Para papás que suelen tener dificultad en ésto mi recomendación es buscar un lugar cercano). Nosotros viajamos de nuestra ciudad Atotonilco el Alto Jal, a Manzanillo Col. Hicimos aproximadamente 4 horas.
Encontramos una casa con alberca particular, esto nos ayudó porque el niño podía desplazarse tranquilo y también como papás disminuyó la ansiedad del cuidado hacia el pequeño. A veces buscar un espacio de esparcimiento libre de alboroto y donde se pueda convivir tranquilamente puede ser un poco más costoso pero vale mucho la pena si como papás también quieren descansar.
Empacamos todo lo que consideramos necesario, mucho bloqueador solar, gorras (cachucha para los que son de México), bañador completo (encontre en shein a muy buen precio y buena calidad), pues sabíamos el querría estar gran tiempo en el agua. Mi cuñada que también asistió llevó una sombrilla gigante, que ayudo bastante para evitar insolación y quemadura en su piel.
Para cuidarlo dentro de la alberca llevamos unos flotadores, pero como Santiago no tiene mucha estabilidad si se le deja solo podía llegar a tomar agua frecuentemente, por lo que optamos agregar una dona de aire en la cintura y fue todo un éxito.
Durante el viaje, encontramos obviamente a más personas porque salíamos a la playa y pues no faltan las miradas o las preguntas a veces incómodas, lo que nos ha ayudado es contestar de forma básica a quien pregunta que tiene y seguir jugando y atendiendo a nuestro pequeño, voy a descansar y a divertirme en familia, a veces también quiero dejar de explicar o pensar en diagnosticos y mas. Las miradas de ajenos no se van, nosotros nos enfocamos en ver la alegría de nuestro hijo y como en familia nos involucramos para todos descansar, esto me lleva al siguiente.
Tomar turnos entre familiares, inclusive pedir ayuda extra con algún familiar o cuidador cuando queremos tener un espacio personal, esto nos permite también soltar un poco y de verdad vacacionar. Nosotros viajamos acompañados de la familia de mi esposo, quienes conocen al niño y se han involucrado en su cuidado desde muy pequeño, entonces mi Suegra a veces nos releva para tener un momento también con nuestra hija mayor o a solas.
Esta creo les va a interesar mucho, en Jalisco tenemos una playa inclusiva a la cual acudimos esta vez, se llama Cuastecomates y fue la primera en todo México, cuenta con andadores para personas con sillas de ruedas, tienes señalamientos en braile y es un pueblo donde se siente el espíritu de servicio, fue un lugar donde no me sentí juzgada, no había miradas extrañas, al contrario mucha amabilidad. También se pueden adquirir unas sillas que son especiales para poder meter a los niños o adultos con discapacidad motora al mar, cosa que me ha parecido de lo más hermoso. Me encantaría que todos tuviesen la oportunidad de ir a una playa inclusiva, en Internet si googlean "Cuastecomates playa inclusiva" podrán encontrar imágenes, así se dan una idea más amplia de lo que aquí les cuento.
De todo corazón deseo que algo de aquí pueda ser de ayuda, que se permitan poco a poco poder salir a vacacionar organizando lo necesario para nuestros niños y jóvenes Syngap1. Espero que tengan un feliz verano y si no puedes salir de casa por alguna razón quizá adaptar dos o tres días a hacer actividades que le guste a tu hijo o tu hija y disfrutarlas en familia es más que suficiente.